Los poppers son utilizados para aumentar la libido, generar una sensación de excitación adicional, además de relajar los músculos durante el sexo anal
Redacción La Chaqueta News
El uso de poppers en la actividad sexual es una elección personal que algunas parejas realizan para intensificar la experiencia. Los poppers son inhalados para producir una rápida vasodilatación, lo que puede resultar en una sensación de euforia y relajación muscular. Durante el sexo, algunas personas encuentran que el uso de ese líquido puede aumentar la libido, reducir las inhibiciones y generar una sensación de excitación adicional.
Es común ver en algunas comunidades homosexuales, especialmente en fiestas o antros el uso de poppers. Algunas personas los utilizan para relajar los músculos durante el sexo anal, ya que pueden ayudar a reducir la tensión, además de aumentar la sensación de placer. Es esencial que cualquier persona que los use esté informada sobre los riesgos que pueden provocar a su salud, al igual, se recomienda utilizarlos con precaución. El uso de poppers no debería ser considerado como una característica intrínseca de la comunidad homosexual, ya que su consumo es variado.
Es importante aclarar, que su uso no está limitado a ninguna orientación sexual en particular. Si bien es cierto que son populares en la comunidad LGTBQ+, también se utilizan en otros contextos, incluidos heterosexuales. Algunas personas, independientemente de su orientación sexual, pueden usar poppers como parte de su experiencia sexual o recreativa.
En entornos de fiesta, pueden ser vistos como un complemento para mejorar la experiencia, ya sea en clubs nocturnos, festivales u otros eventos sociales.
Es importante tener en cuenta que el uso de poppers conlleva riesgos para la salud. De acuerdo con algunos especialistas, el uso excesivo o prolongado puede provocar efectos secundarios como mareos, dolores de cabeza, náuseas, visión borrosa o lo que puede ser peor, problemas respiratorios. Su uso constante puede disminuir la capacidad de tomar decisiones de manera consciente, lo que podría llevar a prácticas sexuales de riesgo, como el sexo sin protección al igual que la exposición a infecciones de transmisión sexual.
Pero, ¿Qué son los poppers?
Los poppers son generalmente líquidos volátiles que vienen en pequeñas botellas. Para usarlos, simplemente se inhala el vapor que se libera al abrir la botella y acercarla a la nariz. No se deben ingerir ni aplicar directamente sobre la piel, ya que pueden ser tóxicos.
Cuando se inhala el vapor, los compuestos químicos que contienen, como el nitrito de amilo, nitrito de isobutilo o nitrito de butilo, se absorben rápidamente a través de los pulmones y entran al torrente sanguíneo, produciendo una rápida vasodilatación y una sensación de euforia.
Los origenes del nitrito
De acuerdo con algunos estudios, los poppers se desarrollaron a finales del siglo XIX como un medicamento para el tratamiento de afecciones cardíacas, debido a sus propiedades de dilatación de los vasos sanguíneos. A lo largo del tiempo, se han utilizado en diferentes contextos, incluido el ámbito médico y, más comúnmente, como un potenciador del placer durante el sexo.
El término «popper» se originó en la década de los 60´s, cuando los productos que ahora se conocen como poppers se vendían en pequeñas botellas de vidrio que hacían un «pop» al abrirse.
Hoy en día, se comercializan en forma de líquido en pequeñas botellas, incluso existen distintas marcas en todo el mundo, y se pueden encontrar en tiendas especializadas, sex shops o en comercios electrónicos.
Si decides usar poppers durante la actividad sexual, es importante hacerlo de manera consciente y responsable. Limita su uso a cantidades moderadas, asegúrate de estar informado sobre los posibles riesgos, además de sus efectos secundarios. Se recomienda siempre mantener una comunicación abierta y honesta con tu pareja sobre tus preferencias. Además, practicar sexo seguro con protección puede ayudar a prevenir cualquier riesgo de ITS o VIH.
